Spam en las redes sociales. Abriste tu cuenta X con la mejor de las intenciones para tuitear contenido valioso y responder preguntas, pero ahora casi todos los tuits que envías son enlaces que promocionan un producto. Si este es tu caso, es hora de cambiar. La promoción está bien siempre y cuando represente sólo el 20-30% de tus tweets como MÁXIMO. El resto debe ser contenido rico y útil para tus seguidores. Y esto es válido para todas las redes sociales, no sólo para X.
Sin pruebas. Creas una nueva página de captación pero no pruebas un titular contra otro. ¿Resultado? Cada día que pasa, está perdiendo dinero. Pruébelo todo y, con el tiempo, el mismo esfuerzo le dará 1,5, 2 o incluso 3 veces más resultados.
No pedir la venta. Tanto si buscas un opt-in, un share o una venta, diles exactamente lo que quieres que hagan. Si no dejas clara tu llamada a la acción, obtendrás siempre resultados menos que estelares.
Ignorar a sus clientes actuales. ¿Está tan ocupado buscando nuevos negocios que se olvida de prestar atención a su activo más importante: sus clientes actuales? Son las personas que ya confían en usted lo suficiente como para haber comprado al menos uno de sus productos. Por eso sus clientes actuales son en realidad sus mejores perspectivas de futuro: trátelos como si fueran oro.
Hablando de ti, de ti y de TI. ¿Sabe por quién se preocupan sus clientes? Ellos mismos. No se preocupan por ti, sólo por lo que puedes hacer por ellos. Suena duro, pero es verdad. Sí, puedes contarles una anécdota sobre lo que te pasó el fin de semana pasado, pero más vale que tenga algo para ellos. Tus clientes no te quieren a ti ni a tus productos. Quieren soluciones a sus problemas. Recuerde esto y no se equivocará.