¿Cuántas personas sentadas en clase turista en un avión desearían estar en primera clase? Lo más probable es que la mayoría, si no todas.

Los pasajeros de primera clase disponen de elegantes salas en el aeropuerto, embarque preferente, asientos cómodos y espaciosos, sus propios auxiliares de vuelo de primera clase, comida y bebida de verdad, mantas, almohadas... todo lo que quieran dentro de lo razonable.

La primera vez que volé en primera clase, fue en una mejora gratuita por haberme hecho perder mi conexión debido a un retraso de la aerolínea. (Eran los tiempos en que las aerolíneas te consideraban un cliente valioso en lugar de ganado).

Me sorprendió lo bien que trataban a los pasajeros de primera clase, incluso trayendo toallas húmedas y calientes para que pudiéramos lavarnos las manos, bebidas gratis, comida completamente comestible, una almohada suave... No quería que se acabara nunca el vuelo.

Y yo también me enganché. ¿Quién quiere volver a clase turista después de volar en primera? Yo no.

Lo que me hace pensar: ¿y si ofreciéramos a nuestros mejores clientes una mejora gratuita?

Piénselo de este modo: Tienes clientes potenciales, tienes clientes y luego tienes clientes ESPECIALES que gastan mucho dinero contigo.

Entonces, ¿qué hacer?

Crea ventajas especiales sólo para estos clientes.

Por ejemplo, puede que les des:

• Su propia área de miembros llena de cosas divertidas y útiles
• Descuentos en todos sus productos
• Primicia en los nuevos productos: pueden comprar tus novedades antes que nadie.
• Descuentos que ha negociado en productos ajenos
• Vídeos especiales que hiciste sólo para ellos
• Información privilegiada sobre su nicho
• Y cualquier otra cosa que se te ocurra que les encantaría

Existen dos vías diferentes para crear su programa de clientes preferentes.

O bien cobra a los clientes por ser clientes preferentes. Puede tratarse de una cuota anual que les permita entrar y les ofrezca todas las ventajas de ser cliente preferente.

O tal vez tengan que GANAR el estatus de preferente a través de las compras que te hagan.

Por ejemplo, puede exigirles que realicen un determinado número de compras o que gasten una determinada cantidad de dinero con usted en un plazo de tiempo que usted elija.

En el primer caso, cualquiera puede convertirse en cliente preferente. En el segundo caso, mientras sigan realizando el número necesario de compras, conservarán su estatus.

Entonces, ¿por qué molestarse en crear un programa de cliente preferente?

Sus clientes preferentes se sienten especiales. Reciben un trato mejor, se les cuida y se les mima, ¿y a quién no le gusta eso?

Sus clientes preferentes se convertirán en sus mejores defensores en las redes sociales. Un cliente preferente satisfecho tiene el poder de contárselo a muchos, muchos otros.

Tus clientes preferidos te buscarán a TI, en primer lugar. Ya sea para comprar algo, pedir consejo o lo que sea, serás la persona a la que acudan en tu nicho, que es exactamente lo que quieres.

Se diferenciará de todos los demás en su nicho. Cuando ofreces el programa de cliente preferente del que todo el mundo habla, te conviertes al instante en una autoridad en tu nicho, lo que te ayuda a atraer aún más clientes.

Sus clientes preferentes venderán productos para usted, así como afiliaciones preferentes. Simplemente haciendo lo que es natural -presumir de las grandes ofertas y del trato que reciben-, es probable que consiga que nuevos clientes acudan a usted a través de las redes sociales sin ningún esfuerzo adicional por su parte.

Obtendrá información para crecer más, mejor y más rápido: un equipo de sus mejores clientes que le darán información sobre cómo mejorar sus productos y le dirán qué les gustaría ver a continuación.

Se mire como se mire, un programa de clientes preferentes es algo muy positivo tanto para sus clientes como para su cuenta de resultados.