Por otra parte, si quieres ser rico, deberías plantearte de dónde viene tu "código moral". El consejo que a todo el mundo le encanta sacar a relucir y mostrar a quien quiera escucharlo es, "Haz lo que amas, el dinero vendrá después".
Hmmm...
¿Y si le gusta escribir poesía? ¿O la jardinería? ¿O hacer cestas? ¿Y si te gusta el ganchillo? ¿O los gatos? ¿O el senderismo? Sí, puedes ganar dinero en todos estos nichos.
Pero... ¿cuánto?
Ganar dinero y hacerse rico son dos cosas totalmente distintas.
Ganar dinero es pagar las facturas y, tal vez, reunir lo suficiente para tomarse unas vacaciones anuales.
Hacerse rico es, bueno, hacerse RICO. Sea lo que sea lo que eso signifique para ti -un ingreso de 6 cifras, 7 cifras en el banco, 8 cifras en inversiones y bienes raíces- tú decides.
Pero garantizado, no vas a alcanzar ninguno de esos niveles de riqueza si te centras en el nicho del ganchillo.
(¿Sabes lo que es el ganchillo? Es coger un gancho y un poco de hilo y hacer un jersey, una bufanda, etc. Divertido y relajante, sí. Rentable, NO).
Bien, si la clave para hacerse rico es seguir el dinero y no la pasión, ¿qué significa eso exactamente? Significa que vas donde está el dinero. Encuentras algo que sea muy rentable y te centras en obtener esos beneficios.
No te esfuerzas por ser el mejor bloguero, el mejor creador de sitios web o el mejor experto en redes sociales. Te centras únicamente en dónde está el dinero y haces lo que haga falta para conseguirlo. (Mantenerse 100% legal.)
Estamos hablando de un cambio de mentalidad: una forma diferente de ver tu negocio..
Si tu objetivo es ser el mejor coach de vida, entonces eres un coach. Pero si tu objetivo es tener el negocio de coaching más rentable posible, entonces eres un empresario. Y como empresario, te darás cuenta rápidamente de que necesitas contratar a otros para que sean los coaches mientras tú encuentras a los clientes. Luego pondrás en marcha sistemas para conseguir los clientes mientras te centras en escalar, y así sucesivamente.
Fíjate en que no eres un entrenador, eres un empresario. No trabajas EN tu negocio, sino SOBRE tu negocio. Sé que esta diferencia puede parecer insignificante para los no iniciados. Pero si miras a cualquiera que haya construido un negocio de 7 cifras o más, verás que dejaron de lado las pasiones y siguieron el dinero.
No son expertos en los productos y servicios que ofrece su empresa. Para eso contratan o subcontratan a expertos. Son expertos en hacer que sus empresas sean grandes y rentables. Eso es el espíritu empresarial.
¿Y qué hay de los que van más allá, creando un negocio de éxito tras otro? Se centran en algo que va más allá del dinero.
Walter White, de la serie de televisión Breaking Bad, lo resume así cuando habla con su compañera Jessie...
"Me preguntaste si estaba en el negocio de la metanfetamina o del dinero. Ni lo uno ni lo otro. Estoy en el negocio del imperio".
Pero eso es un paso más allá.
Por ahora, si quieres hacerte rico, céntrate en dónde está el dinero y en la mejor manera de ofrecer los productos o servicios estelares que te traerán ese dinero a montones.
Y por cierto, si realmente te apasiona el ganchillo, o la poesía, o la jardinería... puedes hacer todo lo que quieras una vez que construyas tu negocio (o imperio) de creación de riqueza y luego lo vendas por megabucks.