El trabajo se expande para ocupar el tiempo asignado, e incluso más, si no tienes un plazo fijo. Así, si te propones terminar tu nuevo ebook en 3 meses, a los 3 meses estarás terminando o, peor aún, te darás cuenta de que sólo has llegado a la mitad. Si, por el contrario, te fijas una fecha de lanzamiento, tendrás el libro listo. Los plazos son algo magnífico: te dan permiso para ignorar el correo electrónico, ignorar Facebook, apagar el teléfono, alejarte de los videojuegos y la televisión y ponerte a trabajar de verdad.

¿Cómo se puede crear un producto en poco tiempo? Haciendo dos cosas:

En primer lugar, fija una fecha límite que esté casi imposiblemente cerca, como por ejemplo dentro de 10 días.

En segundo lugar, hágase responsable a gran escala. Es decir, llame a su mejor amigo de marketing y programe un seminario web en directo con él o ella para vender su nuevo producto. Ahora promociona el seminario web en gran medida.

¿Adivina qué? Durante los próximos 10 días vas a mover cielo y tierra para tener tu producto terminado para ese seminario web, ¡y el día 11 te vas de fiesta!

En primer lugar, vas a celebrar las ventas que hiciste en el webinar.

En segundo lugar, vas a estar esperando todas las ventas que harás en el futuro con tu nuevo producto. De hecho, vas a tomar el impulso que creó el webinar y lo vas a usar para contactar a otros vendedores y organizar más webinars en vivo para sus listas.

Tercero, te vas a sentir fantástico. Ese nuevo producto que pensabas que te iba a llevar 3 meses de tu vida, ¡sólo te ha llevado 10 días!

En cuarto lugar, ahora tienes un sistema no sólo para conseguir productos hechos rápidamente, sino también para conseguir tus primeras ventas en el momento en que el producto está terminado para un pago inmediato.

¿No es genial?