Había una vez un rey que quería bañarse en una piscina gigante de leche en lugar de agua... Había oído que era estupendo para la piel, pero era una tarea demasiado grande para hacerla solo.

Primero ordenó a algunos de sus trabajadores que cavaran un estanque. Una vez cavado el estanque, el rey anunció a su pueblo que una persona de cada casa debía traer un vaso de leche durante la noche y verterlo en el estanque. Así, según sus cálculos, el estanque debería estar lleno de leche por la mañana.

Tras recibir el pedido, todos se fueron a casa. Un hombre se preparó para llevarse la leche durante la noche, pero la leche era muy escasa en este pueblo y quería conservarla. Pensó que, ya que todo el mundo traería leche, podría utilizar un vaso de agua y verterla en el estanque. Seguramente, al ser de noche, nadie se daría cuenta. Así que fue rápidamente a verter el agua en el estanque y volvió contento.

Por la mañana, el rey fue a visitar el estanque y, para su enfado, ¡el estanque sólo estaba lleno de agua pura! Lo que ocurrió fue que todos pensaban lo mismo que el otro hombre que "No tengo que poner la leche, ya lo hará otro".

Cuando se trata de ayuda empresarial, no piense que otros se ocuparán de todo por usted. No estoy diciendo que no aceptes ayuda donde puedas conseguirla. La ayuda es importante, pero recuerda que empieza por ti. Si no haces las cosas por ti mismo o al menos las supervisas, nadie más lo hará y si lo hacen, no podrás quejarte de que lo hicieron mal porque utilizaste algo o a alguien fuera de ti para que funcionara.

Sólo hay un número limitado de expertos, trabajadores, programas informáticos, sistemas, etc. que puedes utilizar para salir adelante; todo eso vendrá más tarde, cuando estés forrado de fortuna. Mientras tanto, si quieres calidad, ensúciate las manos, aprende, trabaja y siéntete realmente recompensado por ello. Así evitarás errores causados por otros, te animarás a asumir responsabilidades y te sentirás realizado.

Si tienes muchos procesos automáticos trabajando para ti y funcionan bien, eso es estupendo. Pero si hay algún lugar en tu vida donde puedas intervenir y decir... "¿Puedo hacer más aquí? ¿Qué puedo hacer hoy que no me molesté en hacer ayer? ¿Qué kilómetro extra de trabajo puedo poner sólo por ahora?". Entonces cada día tendrá un propósito y cada momento estará bajo tu control.

La vida y los negocios dependen de lo que TÚ pongas en ellosAsí que asegúrate de que haces todo lo posible cada día para desarrollar todo tu potencial. Sí, aprovecha la ayuda de otros en el camino cuando sea necesario para mejorar la eficiencia, pero nunca dependas totalmente de los demás. Tu vida es lo que tú haces de ella, así que ¡haz de ella TODO lo que puede ser!