Seamos sinceros: si tienes una buena idea y las ideas fluyen, puedes publicar un vídeo en el mismo tiempo que tardas en grabarlo. Publícalo en tu blog y listo.
No es de extrañar que tantos blogueros se pasen al vídeo.
El problema es que el vídeo no es el santo grial de los blogs. De hecho, si se lleva demasiado lejos, puede llevar a la ruina de tu blog (fíjate en el canto de los grillos, las plantas rodadoras, etc.).
Aquí tienes cinco consejos para utilizar el vídeo en tu blog sin alienar totalmente a tus lectores ni camuflarte ante los motores de búsqueda. O, más concretamente, cinco razones para NO utilizar el vídeo en exclusiva.
El vídeo no sustituye a la palabra escrita (¡lo siento!) Los usuarios no sólo quieren vídeo. Los visitantes quieren tener una idea clara de lo que van a ver antes de darle al botón de play. Por no mencionar el hecho de que muchos de tus espectadores no están delante del ordenador, sino que son usuarios móviles que pueden o no tener una conexión rápida. Si al menos pueden leer la historia y decidir si merece la pena descargar el vídeo, tendrás más posibilidades de captar y mantener su atención.
¿Solución obvia? Incorporar vídeo y escritura en tu blogpost, no sólo vídeo.
Los motores de búsqueda no saben de qué estás hablando. Todavía no ha llegado el día en que los motores de búsqueda puedan descifrar las palabras pronunciadas en su vídeo. Por lo tanto, si desde el punto de vista del SEO sólo tiene vídeo, o vídeo y un contenido pobre, es como si se hubiera puesto una capa de invisibilidad en lo que respecta a los motores de búsqueda.
En su lugar, debe combinar una buena redacción que incorpore sus términos SEO con su vídeo. Los dos juntos forman un equipo estupendo y trabajan mano a mano para hacer que tu entrada de blog sea aún mejor.
Los vídeos malos son, bueno, malos. Vale, si estás haciendo un reportaje delante de un edificio en llamas, usarás tu móvil para grabar el vídeo porque es lo que tienes a mano en ese momento. Pero si estás en tu oficina haciendo vídeos del tipo "cómo hacerlo", POR FAVOR, invierte en una videocámara HD barata. Por favor. Tus espectadores te lo agradecerán.
Además, la improvisación es algo que poca gente sabe hacer. Antes de empezar a grabar, haz un esquema de los puntos principales y colócalo junto a la cámara para no perderte ni olvidar nada. Fíjate en que he dicho esquema: escribirlo palabra por palabra y luego LEERLO es un gran (¡ENORME!) no-no y hará que tu audiencia se duerma más rápido que dos parpadeos.
Ten cuidado con la posición de la cámara. Hace poco vi un vídeo en un importante sitio web de marketing que estaba colocado sobre una mesa de café y ofrecía un plano perfecto de la entrepierna durante todo el vídeo. Qué asco.
Una última cosa: olvídate de los "umms", "errrs" y "ahhhs". Si necesita hacer una pausa de un segundo para pensar en una palabra, hágala. No hace falta que rellenes cada segundo con sonidos, sobre todo cuando esos sonidos (um er ah) te hacen parecer un auténtico aficionado.
Esconder tu contenido debajo de tus vídeos no está bien. Mira, quieres que la gente pase el mayor tiempo posible en tu página, ¿verdad? Entonces empieza tu post con contenido escrito y coloca tu vídeo dentro del contenido - no delante de él. El titular y la entradilla deben captar su atención lo suficiente como para que lean, y en los primeros 2-4 párrafos puedes hacer referencia al vídeo. Si están interesados, lo más probable es que lean el resto de la entrada y luego vean el vídeo.
Por otro lado, si el vídeo aparece en primer lugar, entonces verán el vídeo y se irán (ya han visto el vídeo, ¿para qué leer tu contenido?) O simplemente se irán porque no quieren ver un vídeo sin tener antes una idea de por qué deberían molestarse.
No abuses del vídeo - Piense en el vídeo como un entremés o un acompañamiento, no como el plato principal. Los vídeos deben ser cortos: menos de 2 minutos siempre que sea posible, y desde luego menos de 5 minutos a menos que el contenido sea fascinante.
Conclusión: El vídeo es un complemento excelente para tu blog, pero no debe ser lo único que aparezca en él. Proporcione abundante contenido SEO que atraiga la atención de los lectores y conseguirá que los visitantes permanezcan más tiempo en su sitio web y lo visiten con más frecuencia.