Lo siento, pero es demasiado tarde
Es un hecho que la gran mayoría de las grandes ideas de marketing online ya han sido pensadas y ejecutadas.
¿De verdad crees que vas a inventar el próximo gran invento?
¿Quizá la plataforma de medios sociales que ponga a Facebook en la tumba?
¿O el curso de marketing que hace que todos los demás levanten las manos y se vayan a casa?
¿O tal vez la aplicación de citas que hace que todas las demás cierren?
No.
Lo siento, pero las probabilidades son tan altas como las de que te caiga un rayo dos veces.
Eso sí, no digo que no pueda ocurrir. Sólo digo que no es probable.
Pero la buena noticia es que no hace falta inventar algo radicalmente nuevo que cambie el mundo tal y como lo conocemos.
Ni siquiera tienes que tener una idea que a nadie se le haya ocurrido antes.
El experto en marketing sabe que puede tomar las mejores ideas y reutilizarlas para convertirlas en algo nuevo.
Antes de que te pongas nervioso, te diré una cosa: No es contrario a la ética reempaquetar información o utilizar las técnicas de marketing de otra persona, siempre que se modifiquen.
Obviamente, no vas a copiar algo y hacer exactamente lo que ya se ha hecho, o utilizar exactamente la misma copia, el mismo producto, etc.
No señor. No vas a estafar a nadie.
Pero lo cierto es que las mejores ideas ya se han utilizado. Pero no hay ninguna razón por la que no puedas hacerlas tuyas.
Entre en una librería, vaya a la sección de no ficción y encontrará cientos de libros que contienen básicamente la misma información que miles de libros anteriores.
Sin embargo, estos libros se venden.
¿Por qué? Porque los autores dan su propio toque a la información.
Utilizaré una receta de tarta para ilustrarlo: Supongamos que quieres vender tu propia receta de tarta. ¿Vas a empezar con una lista totalmente nueva de ingredientes que nadie ha puesto nunca en un pastel?
Por ejemplo: "Para hornear este pastel, necesitarás 2 tazas de pollo picado, un paquete de sopa de cebolla, 6 hojas frescas de hierba gatera, media taza de café, 12 pepinillos eneldo, 2 huevos cocidos, medio kilo de cáscaras de patata...".
Ya te haces una idea.
Por supuesto, empezarás con harina, azúcar, mantequilla, bicarbonato o levadura en polvo, etc.
Vas a utilizar exactamente los mismos ingredientes básicos que un millón de chefs y cocineros han utilizado antes que tú.
Pero vas a darle tu propio toque a la receta.
Quizá añada cerezas al marrasquino y canela. O extracto de menta y chocolate negro. O arándanos y zumo de limón.
Sigue siendo una receta de tarta, y no es tan diferente de otras recetas de tartas, salvo que tú le das tu propio toque.
Deje de intentar dar con una idea revolucionaria y limítese a observar lo que funciona y lo que le resulta familiar.
Toma esa información y hazla tuya.
Y luego enseña lo que has aprendido.
Es muy sencillo y no necesitas una idea increíble.
Aquí es donde mucha gente se atasca: creen que no es ético tomar información que han obtenido en otro sitio y hacerla suya.
Así que pongamos un poco de contexto en esto...
Vas a la universidad durante 4 años. Por este privilegio, pagas mucho dinero. Los profesores y los libros de texto te enseñan un montón de conocimientos que A ELLOS NO SE LES OCURRIÓ PRIMERO.
Así es: es lo que podríamos llamar información regurgitada, en el sentido de que otras personas la descubrieron, se les ocurrió, etcétera.
Pero de todas formas les pagan por enseñártela.
Entonces, ¿qué ocurre?
Sales y consigues un trabajo, donde utilizas esta misma información. Y además te pagan por ello.
Así pues, ésta es la pregunta: ¿En qué se diferencia esto de coger información que ya está disponible, darle tu propio giro y vender esa misma información?
Estás haciendo lo mismo que hacen los profesores y la universidad. Y estás haciendo lo mismo que hace cualquiera que consiga un trabajo y utilice esta información en su trabajo.
Sólo lo haces online.
Ahora, ¿te sientes mejor?
Bien.
Porque para muchos de ustedes, acabo de eliminar su última excusa para no fabricar su propio producto.
Suponiendo que ya tienes tu nicho elegido, ve a buscar tus productos favoritos en ese nicho. Estúdielos. Aprenda todo lo que pueda. Pon la información a trabajar en tu negocio o en tu vida.
Y luego crea tu propio producto con tu propia personalidad y habilidades.
Sé que puedes convertirlo en un éxito, y ni siquiera tienes que inventar la rueda para hacerlo.